Gracias a los sonidos del cuenco tibetano nos podemos permitir dejar fluir todo aquello que bloqueamos, coloca tus manos en la parte dolorosa de tu cuerpo. Y mete la intensión de sanar, alinerar, Purificar, perdonar y amar para encontrar la sanación de tu amado templo que es tu cuerpo. Namasté 🙏🏻