Episodio 343 - Temporada 07
Hay momentos en nuestras vidas donde ya no sentimos a Dios, aunque ciertamente Él siempre está contigo y conmigo, sin embargo, la realidad es que nosotros somos los que nos hemos perdido de Dios y de sus maravillas.
Es terrible perder una casa... Es difícil perder dinero, es duro perder un trabajo, pero si hay algo que nunca podemos permitirnos perder es la comunión con Dios. Si tu corazón está lleno de Dios, hablarás de Dios.
Cuando yo tengo comunión con Dios, hay algo que arde dentro de mí que me empuja a trabajar en la obra de Dios.
Recuerda que en el pasado no vives: ¡Ya no estás allí ahora!
Es por eso que cuando tu corazón arde por su Presencia, entonces comprendes en tu interior, que Jesús vino para darnos un presente diferente y un futuro de bendición.
Así que, no permitas que nada te robe la comunión con Él y te deje mirando al pasado. No te llenes de dudas ni de temores, llénate de fe y de esperanza.
“Ese mismo día, dos de los seguidores de Jesús iban a Emaús, un pueblo a once kilómetros de Jerusalén. Mientras conversaban de todo lo que había pasado, Jesús se les acercó y empezó a caminar con ellos, pero ellos no lo reconocieron.”
(Lucas 24: 13-16 TLA)