Raphinha es uno de los jugadores más criticados por el "barcelonismo" de las redes, y lo más alucinante es que uno de los argumentos que usan es el de decir que "sus números son pésimos porque estamos en la jornada 18 y solo lleva 3 goles..."
Obviamente, ese es un análisis muy superficial, sin ninguna profundidad... y en este vídeo he querido profundizar en los números de Raphinha y compararlos con los de grandes jugadores que desempeñan un rol similar, y los datos no pueden ser más concluyentes: Las críticas que recibe Raphinha son brutalmente injustas.
Como añadido decir lo que ya comento en el vídeo, en dos puntos:
1) Messi solo hay uno y ahora mismo ni siquiera hay "Neymars". Los más destacados son los que menciono en este vídeo (y Mbappé, que es más delantero), y ninguno del vídeo mejora en prestaciones a Raphinha en lo que va de temporada y si lo mejora, prepara 100 o 150 millones más un salario mayor al de Raphinha y que no trabaja ni un 20% lo que trabaja él.
2) Raphinha es un Pedro Rodríguez. Pedro fue un jugador importantísimo e infravalorado. Raphinha si es capaz de seguir trabajando siempre así, puede serlo, incluso un punto o dos, superior. En defensa y en desmarque, ambos marcan diferencias, suman gol y asistencia al equipo y muchísima energía. Ojalá tuviéramos un Raphinha natural para la otra banda, porque con dos como Raphinha en ataque, las cosas serían mucho más fáciles.
Si no te gusta Raphinha porque no hace "filigranas", ok. Pero es un hecho que su impacto en el juego a través de la producción de gol (gol+asistencia), desmarque y ruptura de líneas, así como trabajo defensivo y energía que contagia, le convierten en un futbolista importante que si contara con el apoyo del barcelonismo, sería todavía más importante.
P.D: Tiene poco sentido que la gente repita "perdonaré que fallen, pero no, que no se esfuercen", y luego echen hate sobre Raphinha, que deja el alma en cada partido y encima mira sus números...
0:00 - Aclaraciones iniciales
4:07 - Números de importantes jugadores
10:20 - Números de Raphinha y conclusión final