La música sacra cristiana fue una forma de expresión musical nacida desde el comienzo del cristianismo, en un principio herencia de la música judía (cantilación) siendo desarrollada durante los siglos posteriores en multitud de formas, relacionadas con los distintos ritos.
Desde su aparición hasta la actualidad, la música sacra occidental ha producido formas musicales tales como la misa, el Réquiem, el Te Deum, el Magníficat, el Stabat Mater, el Oratorio, la Cantata, el Motete, el Salmo o el Villancico, entre otras.
Hoy repasamos algunas de estas formas vocales sacras partiendo desde el Canto Gregoriano y visitando el Gloria a 7 voces de Monteverdi, el Gloria de Vivaldi, el Motete BWV 227 de Bach, la Missa Brevis nº 9 de Mozart, el Te Deum de Charpentier, el Stabat Mater de Kódaly y, para finalizar, el Ave María de Margarita Lorenzo de Reizabal.
El volumen II de LA MÚSICA VOCAL SACRA abordará un monográfico sobre Réquiems.