La única tarea del cristiano es reunirse con Dios todos los días de su vida por medio de la lectura de las escrituras y de la oración para conocerlo más, se supone que nosotros no deberíamos tener jerarquías bíblicas, humanamente se necesitan para poder tener un orden, pero dice en el Nuevo Testamento que todos somos sacerdotes, tenemos esa conexión con Dios entonces independientemente del ministerio que se desempeñe, todos tenemos esa tarea y es lo que nos debe importar en primer lugar.

Ser un buen hijo, un buen hermano, un buen esposo, un buen trabajador y una buena persona depende por completo de esa primera parte, desempeñas funciones, pero todas dependen de la comunión que yo tenga con Dios, el objetivo que Dios nos da y el mas grande que podemos tener es el poder conocerlo, el fin último que tiene un ser humano es convivir con Dios, todo lo demás son medios, pero hay una diferencia entre medios y un fin y siempre confundimos a Dios como un medio.

El fin último del creyente, antes de predicar, antes de las actividades de la iglesia y de ser buenos, es que la gente conviva mucho con Dios y si nosotros tenemos eso en mente todo lo demás es un medio y no tendremos esa carga y estaremos satisfechos, la satisfacción plena únicamente viene de parte de Dios, nuestros corazones están insatisfechos hasta que haya reposo en Él, tenemos un hueco en el corazón que únicamente lo puede llenar Dios, no hay nada que lo pueda llenar.

El cristiano tiene al Espíritu Santo y eso va a llevar a que el cristiano quiera buscar de Dios, y siempre tendremos ese impulso de orar porque no viene de nosotros viene por parte del Espíritu Santo, nos anhela y quiere estar con nosotros y eso se hace por medio de la oración y conexión con Dios, y Dios tiene hijos de todo tipo y sin importar las capacidades y diferencias unos con otros, Dios los usa sin importar conocimiento ni posición social, no es por conocimiento es por la fe.