Buen partido del Granada CF en La Rosaleda. El empate a dos conseguido merece un análisis profundo acerca de cómo sucedió todo en el partido, ya que el equipo granadinista, por ocasiones de gol, mereció ganar el partido. Pero el punto sabe a gloria, para un equipo que comenzó la temporada perdiendo los tres primeros partidos. Además de perder, la imagen ofrecida fue penosa. Pocos pensaban que poco tiempo después podía ser capaz de arrinconar a un rival incómodo y de calidad, aunque esté compuesto por muchos jugadores de su cantera. Este Málaga CF tiene pólvora y su joven plantilla posee una calidad y frescura innegables. El comienzo del partido fue una continuación de los habituales errores cometidos por los rojiblancos en defensa, algo que llevó a los Pellicer a adelantarse en el minuto diecinueve por cero a dos en el marcador. Pero la reacción de los de Pacheta no se hizo esperar y unos minutos más tarde, Pau Casadesus aprovechaba una dejada de Bouldini dentro del área para conseguir acortar diferencias en el marcador y meter a su equipo en el partido. Luego, nada más comenzar la segunda mitad sería Pedro Alemañ quien consiguiera en tanto del empate después de aprovechar un rechace del guardameta malagueño, que escupió un duro disparo desde fuera del área efectuado por Pablo Sáenz, que fue uno de los que realizaron un magnifico partido entre los rojiblancos. El Granada, con este primer punto conseguido en Liga, tiene que seguir remando porque ahora recibe el domingo al Leganés en Los Cármenes y está obligado a ganar para salir de posiciones de descenso.