El Granada CF prepara durante toda esta semana el partido que el viernes le enfrentará, de nuevo en Los Cármenes, a la Unión Deportiva Las Palmas. El equipo canario es uno de los grandes de la segunda división por ser recién descendido de primera y por el potencial de plantilla que posee. Pero además de por el potencial del rival el partido ha adquirido tintes complicados después de las sendas convocatorias de los porteros de la primera plantilla, Luca Zidane y Astrálaga han tenido con sus respectivas selecciones, Argelia y española sub 21. Circunstancia esta a la que se ha unido igualmente la llamada de la selección española sub 18 al guardameta del equipo juvenil, Carlos Guirao, portero que entrenaba habitualmente con el primer equipo rojiblanco. La ausencia de todos estos jugadores ha abierto el debate a cerca del acierto u oportunidad en la confección de la plantilla por parte de la dirección deportiva y la necesidad de tener a un tercer portero ligado a primer equipo, algo que este año no ha sucedido. El club en este caso parece no haber tenido culpa de lo sucedido. La responsabilidad, como bien expresó Pacheta el otro día, recae en el organizador u organizadores de la competición, Liga de Fútbol Profesional y Federación Española, que son quienes determinan que en las ventanas de selecciones no debe parar la competición en la categoría de plata, con el perjuicio que ocasiona a los clubes que ceden a sus jugadores. El dinero manda en el fútbol y la televisión también. El que paga, en ausencia de fútbol de primera división durante ese fin de semana, quiere que siga habiendo material con el que entretener al que paga sus abonos de televisión. No obstante, este asunto debe tener algún arreglo y los responsables deben encontrar el remedio a este sinsentido.