Es necesario orar para aprender a ser sumisos a la voluntad de Dios y querer lo que Él quiere. ¿Por qué? Ser transformados en hijos conforme a Su corazón nos hará verdaderamente felices en cualquier circunstancia, lugar, o realizando cualquier tarea, por difícil o sencilla que esta sea. Oremos a nuestro Padre intencionalmente para que nuestros corazones sean cartas abiertas donde estén grabados Sus intenciones, pensamientos y Su amor. Esto hará que todos lean en nosotros la bondad y humildad de Jesús. Oremos para cuando recibamos Sus dones y regalos, no nos gloriemos y aceptemos que estamos en mayor deuda con Dios. Que Su corazón palpite en nosotros para que estemos dispuestos a renunciar a todo aquello que dañe a los demás. Ser humildes es ser plenos con mucho o con poco. Recordemos, solo teniendo el corazón de Jesús alcanzaremos esta plenitud. ¡Bendiciones en extremo!

Si quieres encontrar más oraciones poderosas e intencionales, reflexiones e historias cortas que transformarán tu forma de ver el cumplimiento del plan de Dios en tu vida visita nuestra página web: https://www.changeinlifenow.com