Mor-discos

Paco Amoroso – SAETA (Clix / DALE PLAY, 2021)


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Si bien la pandemia detuvo (o más bien encerró) el
ascenso imparable que CA7RIEL y Paco Amoroso estaban teniendo en todo el mundo,
en estos últimos casi dos años no se puede decir que los argentinos hayan caído
en barbecho o no dieran continuidad a un momento creativo especialmente dulce
de dos de las voces y cerebros más versátiles de la movida urbana argenta.


Y aunque en un inicio CA7RIEL es el que acaparó mayor
presencia mediática y su proyecto tiene más tiempo de desarrollo, y su música
lo ha movido en un territorio en el que el trap colinda con el funk, el pop
amorfo o la imaginería impredecible de Frank Zappa; lo cierto es que Paco
Amoroso consiguió que su registro sea el que capitanee las lindes de un nuevo
pop que bebe tanto de la música disco, la indietrónica o la música urbana pero
con un objetivo central: las melodías redondas y las letras de un sarcasmo
romántico fantástico.


Eso es lo que ya dejaba entrever en sencillos que fue
presentando el último año y medio como “Fatal”, “Sabe” o “Mi deseo”,
declaraciones de una movilidad que lo distanciaba del trap duro y lo acercaba
al pop más elegante; y eso es, precisamente, lo que se certifica en “SAETA”,
un álbum debut en solitario en el que pasea por diez climas de un nuevo pop tan
sexy como ultramelódico.


Desde hits para un baile ácido como “Viuda negra” hasta atajos
hacia un nuevo pop (“Imán” o “Ángel de la noche”) que incluso generan alianzas
con iconos como Adrián Dárgelos, líder de Babasónicos (“Switch”); alegatos de
un urban para hacer petting (“Chinga Sport”) o pogo (“Cerebro”); miradas más
cerca de un ñu-disco (“Suite 605”), una suite ibicenca (“Da igual”), un house-pop
al estilo del Gustaco Verati de “Siempre es hoy” (“Pistola desnuda”) o un
r&b electrónico (“Aire”, junto a Lara91k). El mundo novopop de Paco
Amoroso es tan necesario como su descarga verborreico-trapera.

Alan Queipo.
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Mor-discosBy Radio Gladys Palmera