En este episodio hablamos de esta manera en la que Dios le hablo al pueblo de Israel.

El apóstol Pablo nos enseña que lo que paso en la vida de Abraham es una alegoría para el cristiano de hoy.

Dios por medio del profeta Ezequiel le habla al pueblo de Juda sobre lo que vendra a raiz de sus pecados.

En este capítulo vemos como Dios le advierte a Israel y a Juda como ellos enfrentarían un castigo de parte de Él, pero tambien muchas cosas sucederían como consecuencia de sus malas decisiones.

El apóstol Pablo alerta a la iglesia en Galacia de un grupo de personas que les visitaban pero buscaban era traer división.

Dios usa la imagen de como el fundidor lleva al metal al horno para que el pueblo entienda el proceso que esta por pasar.

Por medio de este capítulo vemos las cosas por las cuales Dios traería el castigo sobre Jerusalén.

Ya no somos esclavos. Somos hijos, y si hijos tambien herederos.

El apóstol Pablo responde esta pregunta explicando el proyecto de Dios con Israel, primero la ley, luego Jesucristo.

Abraham le creyo a Dios y le fue contado por justicia. Los que crean en Jesucristo serán justificados por la fe.