-La provisión de Dios nunca se apartará de nosotros. Dios va a abrir para ti puertas y caminos nuevos.
-Dios nos enseña que enfatizará el espíritu de la ley antes de la letra de la ley.
-En tiempos de sequía, Dios me llevará a un lugar seguro. Sobrenaturalmente me guardará en tiempo de angustia.
-En su majestad, Dios usa hasta a las aves impuras y a las personas impías para mantener vivos a sus hijos. Tan grande y gloriosa es su potestad.
-Dios proclama que en la hambruna Él nos proveerá maná y un arroyo para sobrevivir.
-Nuestras expectativas acerca del socorro y sustento de Dios, deben ser ilimitadas. Tira por la borda el pensamiento de escasez.
-Sigue manteniendo tu fe. Muévete, toca las puertas. La fe las abre.
-No practiques una fe pasiva. Usa tus habilidades y no te quedes sentado. Piensa en grande, piensa en abundancia. Papá provee lo que tu le pides.
-Todo el que busca a Jehová, no le faltará ningún bien.
-Conoce los tiempos para cada acción, para saber que hacer. Se administrado, mantén la fe, y la provisión de Dios estará allí.
-La palabra que tu sueltes para tu Casa, será profética, y de forma sobrenatural, a ésta no le faltará nada. A la Casa le irá bien.