No limites o fracciones las bendiciones que el Señor tiene para ti. Dios es un Dios de recompensas totales.
Nuestra incredulidad en las cosas de Dios parcializa y limita su poder en nosotros.
Por no reconocer la identidad en Dios, nos perdemos la totalidad de su premio.
No hay destino ni reconocimiento cuando no nos damos cuenta de la presencia del Señor. Sin reconocimiento no vemos la gracia.
Reconoce a Dios en tu vida natural y vivirás en un plano sobrenatural.
Es importante saber, reconocer y advertir la unción de Dios.
Honra y corona quiere Dios poner en tu cabeza.
Honrar es dar un alto honor. Tú necesitas ser bendecido.
Valora las bendiciones que están llamando a tu puerta. Recibe la unción que honra.