Los lugares, manifestaciones artísticas, científicas, arquitectónicas, así como la producción bibliográfica y documental, entre otros, que se consideran de acceso abierto, forman parte de la construcción de lo público y se transforman en función de su importancia e impacto en la sociedad. Estas transformaciones dan lugar a representaciones de identidad común y a bienes del patrimonio colectivo. En términos generales, esto se conoce como patrimonio cultural, entendido desde una perspectiva que resalta su valor y significado social.