Entiendes ahora que sin Cristo Jesus estamos muertos, estamos al agua sin esperanza alguna de poder vivir, de poder salir de ese lugar, sin la capacidad de poder sobrevivir.
Que no son las frases motivacionales, palabras proféticas, sueños, estrategias, lo que nos salvara, sino que a menos que el evangelio de Cristo Jesus, que es Cristo Jesus mismo dándose a nosotros.