Desarrollar un proceso de planificación estratégica denota la seriedad con que la junta directiva enfoca las actividades, los servicios, y, sobre todo, el futuro del club.

Sin los conceptos esenciales de la planificación estratégica resulta difícil creer que de verdad existe un compromiso por trabajar en una dirección y hacia unos objetivos de futuro concretos. No es una tare fácil, y con frecuencia se recurre a consultorías que ayudan a diseñar, planificar, desarrollar y facilitar el proceso.

Pero el resultado es como una revelación para todos los afectados: los socios, que perciben el compromiso de servicios; los empleados, que perciben la coherencia y la coordinación en cada área de trabajo; y para los directivos, que han podido plasmar y definir con claridad la cultura que esperan crear en ese entorno tan especial.