En octubre de 1973, Egipto y Siria lanzaron un ataque sorpresa contra Israel en plena festividad judía del Yom Kipur. La reacción occidental —especialmente de EE. UU.— fue apoyar militarmente a Israel. En respuesta, la OAPEC (países árabes exportadores de petróleo) impuso un embargo petrolero selectivo contra Occidente como castigo político.
El efecto fue inmediato: el precio del barril se cuadruplicó en pocos meses, pasando de unos 3 USD a casi 12 USD. En Estados Unidos, las gasolineras se vaciaron, se aplicó el racionamiento de combustible y hubo colas kilométricas. Europa no fue la excepción: inflación disparada, estancamiento y medidas de emergencia energética en todo el continente.
Esta crisis no solo provocó una recesión mundial, también transformó la política energética global. Nacieron reservas estratégicas, nuevas políticas de ahorro y un mensaje claro: el mundo era vulnerable ante el poder geopolítico del petróleo.
Fuentes: Wikipedia, Federal Reserve History, Investopedia, Britannica, The Conversation.