La Biblia nos llama a dar gracias en todo, no porque todo sea fácil, sino porque Dios está obrando aun en lo que no entendemos. La gratitud no niega el dolor; lo llena de propósito y mantiene viva la fe.
“Fiel es el que os llama, el cual también lo hará.”
1 Tesalonicenses 5:24
Dios no ha terminado contigo.