Comunidades ejidales de Sonora se han manifestado ante el plan estatal que pretende la construcción de 3 presas y 2 acueductos en torno al Río Sonora y las áreas naturales protegidas cercanas.
La semana pasada se reunieron con el gobernador Alfonso Durazo para plantear la crisis hídrica que enfrentan desde hace 10 años, y cómo la construcción de las presas Abelardo L. Rodríguez y El Molinito redujeron la superficie agrícola y paralizaron el acceso de las comunidades al agua para consumo humano, operando sin respetar concesiones, reglamentos y evaluaciones ambientales. Por ello, nos recuerdan que "los acueductos no producen agua". La crisis actual es la muestra de lo que va a suceder con las nuevas presas; pero, nos dice, no es que no haya agua, sino que está mal distribuida, pues a Grupo México se le permite extraer 52 millones de metros cúbicos de agua al año del manto acuífero del Río Sonora.
El Ingeniero Limón resaltó también la baja eficiencia del sistema de suministro actual, en el que se pierde el 55% del vital líquido. La alternativa es mejorar el suministro con énfasis en los derechos humanos, en vez de la construcción de más presas y acueductos.