El Señor nos promete nueva tierra y nuevos cielos y que en ellos ya no habrá llanto ni sufrimiento y tampoco tendrá poder sobre nosotros la muerte

El Señor prometió darnos un nuevo corazón y un nuevo espíritu y así transformarnos y lo hará desde dentro hacia afuera estando pendiente de la persona que estamos llegando a ser

El apóstol Pablo le dice a los filipenses que él sigue con la vista puesta en la meta y esta es su verdadera prioridad, ya que la meta es Cristo

El profeta Miqueas dijo que de Belén saldría el Señor de Israel, el Mesías y esto se cumplió en el tiempo y el momento adecuado.

Estaba a punto de festejarse, en Jerusalén, la pascua donde Jesús iba a ser crucificado y unos griegos supieron que el Señor estaba allí y con énfasis le dijeron a Felipe: "Señor queremos ver a Jesús"....

El Señor dice en su Palabra, "Ahora bien, se requiere de los administradores, que cada uno sea hallado fiel" y sabemos que habrá recompensa en los cielos para todos aquellos que han sido fieles con las cosas que Dios puso en nuestras manos, debemos cuidarlas y hacerlas crecer

Somos preparados para llevar las obras del Señor adelante en nuestras vidas y así poder glorificar su Nombre y que ocupe el primer lugar en nuestros corazones

Cristo volverá a juzgar a las naciones y tendrá en buena estima a sus amados hijos y llevará a éstos al reino que ha sido preparado para ellos desde la fundación del mundo

Dios le había prometido un hijo a Abraham pero el tiempo pasaba y nada sucedía y es entonces que Abraham se queja con Dios y Éste vuelve a corroborar su promesa y Abraham creyó en Dios y esto le fue contado por justicia

El apóstol Pablo le habla a los efesios para que pongan sus esfuerzos en la oración y la misma debía ser en el Espíritu y que la misma nos mantendría a salvo de los peligros reinantes en el mundo actual