En esta vida llena de afanes, hay una lista casi interminable de cuestiones que quieren ocupar el primer lugar en nuestro tiempo, pero ese lugar en realidad sólo le debería pertenecer a alguien: Dios.
En esta vida llena de afanes, hay una lista casi interminable de cuestiones que quieren ocupar el primer lugar en nuestro tiempo, pero ese lugar en realidad sólo le debería pertenecer a alguien: Dios.