Las vacunas duelen, de vez en cuando, pero el beneficio es mayor. Los fenicios si que sabían donde se asentaban, pishita, no como algunos planetas por ahí perdíos que enciman son engullidos. Tengo una nariz muy distinguida y encima se lo debo a los Neandertales. Coge tu paquete de palomitas, que hoy nos vamos al cine para dar alabanzas. Ah, que sepas que un huevo frito es un drama, sobre todo para las proteínas que se desnaturalizan. Todo esto, como siempre, a un clic de tus oídos.