Después de un periodo de inactividad por estar en otras actividades, vuelve Ciencia Radiante rebosante de ganas y energías, no como el Universo que, al parecer según un último estudio parece ser que gira mientras se expande, pero muuu lentamente, sin estrés. Menos mal que unos sesudos científicos han encontrado el mecanismo de activación cerebral, ese que está presente en todas las acciones diarias (y, no, no pienses que se llama café mañanero, que eres un poco bocas) Pero para bocas, la conversación grabada entre dos plantas que se alertan por amenazas. Asi que sí, confirmado, tu poto habla asi que riégalo y dale los mimos correspondientes. Las efemérides nos encantan, por situarnos en esos momentos especiales de la Ciencia y porque vienen dobles: la primera, homenajeando al naturalista Carl von Linneo, el científico que nos dio herramientas precisas para clasificar a todos los seres vivos del planeta (toditos todos, no sabemos cómo se las ingenió para clasificar al ornitorrinco); la segunda, la postulación de la teoría heliocéntrica por parte de Nicolas Copérnico y sus numerosas noches tendido al raso de la fría Polonia mirando el cielo. Nos encanta tener colaboradores en el programa y en este ha vuelto nuestra más nanoscópica de ellas: Jerusalén nos habla de como ver en la escala nanométrica y que técnicas de microscopía se usan. Por último, antes de que te duermas, hemos decidido hablar del café, pero no exactamente de variedades, moléculas y demás letanías científicas, sino de las grandes dificultades de tomarse un expreso en taza en mitad del espacio. Si, la vida del astronauta es doblemente dura. En fin, todo esto, como siempre, a un clic de tu oido.