Herramientas como ChatGPT o Copilot han tenido una explosiva adopción en el mundo, y en nuestro país, cuatro de cada cinco trabajadores declaran usarlas. Aquello ha ido de la mano de una serie de interrogantes: ¿Nos quitarán el trabajo las máquinas? ¿A quiénes preocupa más quedar obsoletos?

En la reciente encuesta del Centro de Estudios Públicos (CEP), un 52% de los encuestados que posee trabajo remunerado está “muy preocupado o bastante preocupado” de que las tecnologías digitales reemplacen muchas de las labores realizados por personas en los próximos cinco años.

En #SinPretexto, el investigador del CEP, Gabriel Ugarte, advirtió que “los empleos de alta y baja calificación son los de menor riesgo de ser automatizados. Lo que está en el medio, una amplia cantidad de trabajo, son lo que tienen mayor riesgo”.
 
Sin embargo, Ugarte manifestó que los estudios a nivel global se enfocan precisamente en los empleos más protegidos frente a la automatización: “Tareas que requieren sensibilidad social, atención y cuidado de personas. Un segundo grupo, es todo lo que requiere inteligencia creativa, diseñador gráfico, director de cine. Hay una primera categoría que tiene que ver con la destreza manual, donde uno podría incorporar al electricista, al gasfiter, que son tareas difíciles de automatizar por ahora”.

Finalmente, apuntó a que el principal desafío es la preparación, intensificando la capacitación laboral en tecnologías digitales, acompañadas de políticas de formación y reconversión por parte de las empresas.