(2 Corintios 1:3-4) “¡Demos gracias a Dios, Padre de nuestro Señor Jesucristo! Él es un Padre bueno y amoroso, y siempre nos ayuda.
Cuando tenemos dificultades, o cuando sufrimos, Dios nos ayuda para que podamos ayudar a los que sufren o tienen problemas”. Hoy Dios quiere acercarse a ti, darte un abrazo y decirte que te ama con amor eterno. No te sientas indigno, no creas que Él se ha cansado de ti, Él es un Padre Amoroso que siempre busca el bien para sus hijos.