(Nota: hay un ruido eléctrico en el audio de Chicho, pero desaparece en el minuto 10. Aguantad, merece la pena).
Chicho, Ortiga, Manuel...da igual cómo le llames a este Santiagués inclasificable. Desde su piso al norte de la capital de Galicia cocina, literalmente, los temas que estaremos bailando en los próximos meses.
Samplers y sintetizadores comparten espacio con los cacharros de cocina, y estas semanas de confinamiento le están sirviendo para profundizar en proyectos que necesitan de esas horas extra.
Veña merengue, que empiece la cumbia y gósalo.