El lago de la pesadilla, sin dudas uno de los grandes poemas de H.P. Lovecraft, retrata la visión sobrecogedora de un hombre, tal vez onírica, tal vez real, de un lago sombrío en el cual pululan toda clase de criaturas aborrecibles. No obstante, debajo del lago hay algo peor: una antigua ciudad sumergida que hace empalidecer los horrores de la superficie.