Vivimos programados, como un ordenador. En nuestra psique, hay programas de funcionamiento, patrones que nos hacen sentirnos incluidos en el grupo (la familia, la sociedad…). Son sutiles y no suelen molestar por ser “lo acostumbrado”. Da miedo salirse de la programación, pero a veces es la vida la que nos saca de lo habitual y nos coloca en lugares (generalmente incómodos) en los que las lecciones se me antojan más “importantes”. Creo que no es fácil salir de esos lugares para volver a lo convencional, así que lo mejor es aprender de lo que aparece y aceptar que tenemos ante nosotros un nuevo camino que puede enseñar/ayudar a muchos. No controlamos nada, ni siquiera nuestra respiración, así que relájate si te sientes una oveja negra y fíjate en lo que se repite, para aprender de ello y que la travesía sea lo más llevadera posible. Te invito a una meditación en la que aprender a soltar el control de la respiración y hacernos amigos de ella para aprovechar todo lo que nos aporta. Con cariño, despacito; como si fuera un juego. 🙏🏼