¡Regresamos! Iniciamos la segunda temporada conversando sobre la necesidad que tenemos como hombres de ser compañeros espirituales. Nadie es capaz de crecer solo, nos necesitamos unos a otros para llegar a ser los hombres que Dios desea que seamos. Pero, ¿por qué nos cuesta tanto estar dispuestos a esto? De esto platicamos y aprendimos, como siempre, yendo a la Biblia.