Es tan extensa la carrera de esta formación que me resulta difícil y hasta injusto, en algún punto, hacer referencia a ellos a partir de alguno de los tantos recuerdos y vivencias que me acompañaron a lo largo de todos estos años. Vienen a mí me memoria, por ejemplo, cuando escuché en un equipo de música soñado, los de moda en aquellos tiempos, con los parlantes altos de madera, los primeros acordes de Nena de 17, o la emoción que me provoca escuchar “Cuando con mi viejo iba a la cancha” de Aún sigo cantando, la energía y la polenta de “la Muralla” o “La luz del río”, la nostalgia de “Tus viejas cartas” y el rostro de mi vieja cuando tenía que emprender mi regreso a Córdoba en los versos de “Cada vez que digo adiós”.. que te vaya bien, mi amor, yo te espero… Siempre te esperaré… Ellos en algún momento también tuvieron que dejar Mendoza en búsqueda de nuevos horizontes, sacrificio que tuvo sus frutos. Años después, llegó el momento de trascender las fronteras de la Argentina, conquistando a Latinoamérica toda, pasión que sigue y se mantiene intacta en el presente y que perdurará por siempre. Mendoza tiene los andes, las acequias, el vino y las raspaditas… también es la afortunada tierra que vio en nacer a los Enanitos Verdes. Con enorme placer, presentamos a nuestro invitado del día de hoy, el Sr. Felipe Staiti.