¿Dónde está tu Dios? Esa es la pregunta del pueblo de Israel en el destierro. La misma de muchos seres humanos ante situaciones incomprensibles. Dios parece dormido o lejos..., pero el salmista tiene la experiencia de su pueblo y Jahvé aparece, siempre, pero..., ¿cuándo?... en el momento preciso y oportuno, aunque no coincida con lo que nosotros queríamos.
Decretos del salmo, elige alguno: “¡Socórrenos, Dios Salvador nuestro, por el honor de tu Nombre!
“que tu ternura se apresure a alcanzarnos“.
Feliz jornada, paz y bien.