El impulso sexual y el deseo pueden convivir separados uno del otro, pero cuando se les combina surgen escenarios lúbricos, se construyen fantasías que no se dicen en voz alta, aunque toman forma en la privacidad de la mente, la mayoría los calla, pero otros lo vuelven su estilo de vida. En este episodio te contamos cuales han sido algunas de nuestras fantasías y otras más que tenemos pendientes de cumplir. Disfrútenlo