RL Stine se nos hace adulto con una historia en la que tenemos todo lo necesario para un gran libro de Pesadillas: canciones guarras, acoso escolar y conductores de autobús graciosos. Para sobrellevarlo, tendremos con nosotros a Txarko ayudándonos a meter el componente que le faltaba al programa: fútbol. Todo esto y referencias forzadas a Operación Triunfo en Temblad, Muchachos, Temblad.