Con el fallecimiento del Papa Francisco, el Vaticano se prepara para un nuevo cónclave. Y entre los posibles sucesores, destacan dos cardenales de tez negra: Peter Turkson, de Ghana, y Robert Sarah, de Guinea. Ambos han captado la atención internacional no solo por su trayectoria, sino también por lo que representarían simbólicamente para el futuro de la Iglesia.