Las bienaventuranzas son un código de santidad que nos llevan por un camino seguro a la felicidad.

San Juan Crisostomo nos presenta que una Virgen, un madero y la muerte antes fueron signo de derrota, con Cristo, la Virgen, un madero y la muerte son signo de victoria.

San Francisco de Asís al mirar la Cruz comprendió que debía seguirlo en la pobreza, en la humildad y en buscar su crucifixión. Contemplar al Cristo nos lleva al amor.

Oración, limosna y ayuno, son tres acciones que nos ayudan a vivir intensamente esta Cuaresma proponiéndonos las cosas importantes de esta vida: Dios, los hermanos y nosotros mismos...

Dios llama y espera la respuesta de cada uno para vivir una dimensión en la Iglesia y poder seguir construyendo el Reino de Dios.

El Discernimiento es un arte porque es el ejercicio de la inteligencia espiritual con el que aprendemos a ver la realidad con una mirada contemplativa, descubriendo en nuestra vidas las huellas de la presencia de Dios.

¿Qué es la dirección espiritual? ¿Para qué sirve la dirección espiritual? ¿Tienes ya tu director espiritual?

Invitación para ir del polvo a la vida porque somos polvo y a polvo volveremos....

Anímate a vivir la santidad. Todo bautizado es santo. Paz y bien.