mismo año cuando la música latina asaltó la industria del pop en Estados

Unidos, poco antes de unas elecciones históricas en las que Donald Trump salió

derrotado, The Mavericks lanzaron su primer disco cantado íntegramente en

español tras una carrera de más de tres décadas. El momento, desde luego, no es

casual pese a que la banda haya insistido que no hay un mensaje político detrás

más allá de “derribar muros”. Más claro…

Icono del

género country, el grupo comandado por Raúl Malo, compositor y cantante nacido

en Miami en 1965 de padres cubanos, llevaba fantaseando con la idea de

saltar al español desde la reunión de la formación en 2012 tras un hiato de

varios años. Entre gira y gira fueron sumando versiones de clásicos latinos que

su líder escuchaba de pequeño, desde Celia Cruz con La Sonora Matancera

hasta Juan Gabriel, Los Panchos y Omara Portuondo.

Acompañado

de su legendaria banda, con invitados de postín como el acordeonista Flaco

Jiménez, el teclista Alberto Salas (Los Lobos) y sendas secciones de metales y

cuerdas, Raúl Malo adapta su voz a géneros como el tex-mex, las rancheras,

los boleros, el son jarocho, el mambo, la cumbia y hasta el cha cha chá,

alternando canciones originales con una selecta lista de versiones.

Un

hermoso canto no sólo a la música latina sino a toda una comunidad que cada vez

es más visible y poderosa en Estados Unidos, que ya no quiere seguir

escondiéndose de políticos y policías racistas sino celebrar con orgullo sus

orígenes.

José

Fajardo