Una historia narrada en lenguas semíticas nos cuenta sobre una mujer que, al mirar atrás hacia su pasado y deseos, se convirtió en una estatua de sal, simbolizando el estancamiento (Génesis 19:26). Esta increíble historia, se línea profundamente en mí, reflejando momentos de mi vida en los que he sentido la pesadez de una estatua, atrapado por mis deseos y emociones en lugar de guiado por sabiduría.
Sin embargo, la historia no termina en estancamiento. Jesús reinterpretó el concepto de mineral, afirmando que somos la sal del mundo (Mateo 5:13). Este cambio de perspectiva nos enseña que, aunque podamos sentirnos atrapados, estamos destinados a ser elementos que dan sabor y vida. Recordar las palabras de Jesús, “no mirar atrás” (Lucas 17:32-33), nos insta a avanzar hacia nuestro propósito, rompiendo las cadenas que nos atan al pasado.
Utilizando las experiencias de la vida y la meditación en Su palabra, podemos transformarnos en una esencia vivificante. Al igual que Jonás, que fue tragado por un pez por no seguir el llamado que Dios ponía en su corazón (Jonás 1:17), debo aprender a creer y avanzar, sabiendo que incluso nuestras “erupciones” y momentos difíciles pueden traer crecimiento y vitalidad a largo plazo.
Camilo Pimor en el Podcast "Theos Podcast" se expresa desde el fondo sobre este tema.
//Music Credits: The background music used in this podcast is “With Everything,” performed by Hillsong Worship. Written by Joel Houston. Produced by Joel Houston, Andrew Crawford, and Reuben Morgan. Source: Hillsong Music and Resources LLC.