El capítulo uno de Tito nos ha presentado la necesidad urgente de nombrar ancianos en cada iglesia local en Creta con requisitos de vida, carácter y fe muy altos, con el fin de contrarrestar la falsa doctrina, y el mal carácter en general de los habitantes de Creta. En especial, había la necesidad de corregir o completar lo que faltaba en la iglesia local