Sumérgete en la culminación de nuestra serie sobre la Reforma con la última y más fundamental de las Solas: Soli Deo Gloria. Descubre, a la luz de Romanos 11:36 , por qué Dios no comparte su gloria con nadie y cómo cualquier pretensión de robarla es vana. Este sermón nos guía a entender que la verdadera gloria de Dios no solo se ve en la Creación, sino que resplandece con compasión y misericordia en el rostro de Jesucristo, quien es el resplandor de Su propia gloria. Conoce a Cristo para dejar de gloriarte en ti y empezar a disfrutar de Su gloria para siempre.