En la vida nos encontraremos constantemente con piedras que nos quieran hacer tropezar en nuestra relación con Dios. Con la ayuda del Señor podemos evitarlas, y vivir con Él en el cielo, en vez de pasar en el suelo.
En la vida nos encontraremos constantemente con piedras que nos quieran hacer tropezar en nuestra relación con Dios. Con la ayuda del Señor podemos evitarlas, y vivir con Él en el cielo, en vez de pasar en el suelo.