Con masivas marchas en Moscú, los rusos conmemoraron un nuevo aniversario del triunfo soviético sobre las tropas de Hitler, en 1945. En la ocasión, Putin volvió a justificar la invasión de Ucrania. Mientras, desde el centro de Kiev, Zelensky acusó a Rusia de organizar una "sangrenta reconstrucción del nazismo". Nuevos ataques se registran en Járkov y Odesa.