Pareciera que las estructuras de poder, grupos, se apropian de estos conceptos y crean su propia normativa y protocolos, discriminando, limitando, restringiendo al resto de los individuos a creer, pensar, pertenecer al mismo grupo. Por ser gay me habían hecho sentir que Dios me odiaba y que no podía mantener una relación con él, Ahora sé que mi relación con él es única, privada e íntima.