Deja que el Amor de Dios irradie sobre ti mediante tu aceptación de mí. Mi realidad es tuya y Suya. Cuando unes tu mente a la mía estás proclamando que eres consciente de que la Voluntad de Dios es una.
Deja que el Amor de Dios irradie sobre ti mediante tu aceptación de mí. Mi realidad es tuya y Suya. Cuando unes tu mente a la mía estás proclamando que eres consciente de que la Voluntad de Dios es una.