Nuestro satélite natural, se viste de gala, para regalarnos su energía plateada con la vibración de transformación. La fuerza de Aries, Quirón y Plutón no ayudarán a revelar los miedos y dolores más profundos y ocultos, para enfrentarlos y decidir a través de la aceptación de la vulnerabilidad, el despertar como seres conscientes y nuevos, gozando de abundancia física y espiritual.