Lucas 9,18-22
Una vez que Jesús estaba orando solo, en presencia de sus discípulos, les preguntó: «¿Quién dice la gente que soy yo?» Ellos contestaron: «Unos que Juan el Bautista, otros que Elías, otros dicen que ha vuelto a la vida uno de los antiguos profetas.»
Él les preguntó: «Y vosotros, ¿quién decís que soy yo?» Pedro tomó la palabra y dijo: «El Mesías de Dios.»
Él les prohibió terminantemente decírselo a nadie. Y añadió: «El Hijo del hombre tiene que padecer mucho, ser desechado por los ancianos, sumos sacerdotes y escribas, ser ejecutado y resucitar al tercer día.»
Buscaré Tu Rostro
Andrés, Andrés, qué te pasa??
Mírame, a donde vas, ven aquí!
Estas temblando, qué pasa?
Pero es que tu no lo has oído Simon? Has escuchado lo último que ha dicho Jesus? Que le van a ejecutar!! Que va a padecer mucho y morir. Es que no me lo puedo creer.
Ya… yo tampoco entiendo nada, no te voy a engañar. Pero bueno, luego ha dicho algo de que iba a resucitar.
Resucitar? Después de la muerte? Pero si eso es imposible hombre!!
No sé, no sé.
Estoy perdido, muerto de miedo. Empiezan a entrarme las dudas, no sé si hemos hecho bien en meternos en todo este lío de seguirle…
A ver a ver hermano, calma.
Mírame.
¿Tú confías en mi?
Bueno da igual, no respondas.
No me mires a mí, mírale a Él.
Sin prisa.
Mírale, pero mírale bien, no de reojo.
No confías en Él? No nos ha cambiado la vida desde que le dejamos que entrara en ella?
Me dan igual los signos y los milagros que estamos viendo.
Tú sólo mírale y escucha sus palabras.
Es verdad que a veces son raras o difíciles de entender para nosotros que solo somos unos torpes pescadores.
No tengo ni idea de qué querrá decir todo eso de morir y luego resucitar. Pero lo que sí que tengo seguro es que no nos va a abandonar. Es imposible que nos deje aquí solos. No tengo nidea de lo que nos depara este camino de seguirle. Pero lo que si que te aseguro hermano… es que nunca nos va a abandonar.
Qué tal? Más tranquilo? Es normal que te entren dudas, a mí también me pasa. Pero es cuestión de mirarle, de buscar su rostro, y te vuelve la paz.
Podríamos componer una canción que se llamará así: Buscaré su Rostro.
Ahora sí que estas delirando del todo Simón!
Anda vamos otra vez con todos.
Oye, y gracias, de verdad.
Que dices, para eso estamos brother!