Es la
época de la exploración de la identidad a través de obras culturales que nos hacen
comprender, a quienes las componen y a quienes las disfrutamos, esas preguntas
que nunca pasan de moda: quiénes somos, de dónde venimos, a dónde vamos. Luz
Elena Mendoza, la artista total detrás de Y La Bamba, nacida en Estados Unidos
de padres mexicanos, regresó a su país dejando la ciudad donde ha crecido como
artista, la muy indie Portland, en una búsqueda identitaria que la enfrentó con
sus traumas y el peso de la historia.
‘Lucha’ es
un pasito más en una carrera visionaria, desde lo experimental y la
independencia artística, que ya suma 15 años. Y La Bamba se adelantó a
mezclar sonidos modernos -del weird folk al dream pop y hasta el post punk- con
los ritmos tradicionales de México -corridos, rancheras, boleros- y otros
populares latinoamericanos, como la samba o la cumbia. Todo eso queda
reflejado en este álbum, que bien podría encajar en una de esas bandas sonoras
elegantes, románticas, tristes y misteriosas de Wong Kar-wai.
La
identidad chicanx – la comunidad nacida en Estados Unidos de origen mexicano-,
el amor queer, la salud mental y la soledad que inunda el universo y que parece omnipresente tras la
pandemia, son temas que van moldeando estas canciones en las que, sin embargo,
atraviesan rayos de esperanza a partir de la autoaceptación y la comprensión de
la realidad que nos ha tocado vivir. A partir de una versión del ‘I’m So
Lonesome I Could Cry’ de Hank Williams, o junto al icono indie Devendra Banhart,
siempre desde una mirada muy personal, Y La Bamba firma uno de los álbumes
más importantes de 2023.
José
Fajardo