Una profunda reflexión acerca del dolor y sufrimiento de un paciente personaje Biblico. Nos hacemos y aquel también se hizo preguntas legitimas, nosotros muchas veces con falta de fe, de esperanza, frustraciones o a veces mucho llanto. Pero... hay esperanza. Hay consuelo aquí, pero será duradero un día y por la eternidad, y como dijo nuestra gran poetiza chilena, "no para siempre durara el invierno, sino que pronto llegará la primavera".