En este último segmento de una inusual y prolongada introducción se desarrollan los siguientes temas:

Siendo fieles a la división tradicional hebrea (ley, profetas y escritos), siendo esta la que el mismo Jesús utilizó. Esta introducción era justa y necesaria para comprender la importancia del A.T. y la gran relevancia en la vida del creyente hoy en día. 

El propósito es lograr tener una perspectiva cuando se comiencen a desarrollar las exposiciones libro por libro y comprender como todo forma pate de ese gran rompecabezas de 66 piezas que forman una imagen final que se cumple en la persona y obra de Cristo. 

Este segundo segmento es una continuación de la introducción al A.T.

Los temas a desarrollar son:

A través de 3 pequeñas secciones de describirá la razón por la cual la Biblia hebrea tiene un orden diferente a nuestras Biblias en español. De igual forma una relación entre Génesis y Apocalipsis a través de un ejemplo de quiasma donde comprenderemos la armonía entre un libro y otro. Y finalmente, la relación de los 4 libros donde se brinda la ley (Éxodo, Levítico, Números y Deuteronomio) y la estrecha relación con los 4 Evangelios (Mateo, Marcos, Lucas, Juan) Explicaremos por qué Génesis no se considera. También la importancia de Moisés como una sombra del Supremo Mediador del Pacto: Jesús. 

Es importante que tengamos en mente dos puntos esenciales cuando abordemos el A.T.:

Cuando comprendemos la centralidad de Jesús y el contexto del Reino de Dios, nuestra lectura del A.T. cambia por completo. Vemos como e forma natural cada libro que leemos desde Génesis hasta Malaquías nos habla acerca de la obra, persona y enseñanza de Cristo. 

Sin duda, es un tema que es necesario para poder comprender de forma correcta, enseñar, predicar e interpretar adecuadamente el A.T.