Artículo del profesor Jorge Ángel Livraga publicado originalmente en la revista Nueva Acrópolis de España n.º 31, en el mes de septiembre de 1976.
"Ante todo, hemos de determinar qué podemos entender por magia, dado que esta palabra, como tantas otras, ha sido tergiversada con el correr de los siglos, con el cambio de las opiniones, con las distintas direcciones de los vientos de la historia, y ha tomado diferentes significados.
Parece entenderse por magia una suerte de prestidigitación, o de hechicería, contraria a las religiones. Sin embargo, magia, etimológicamente tiene su raíz en Mag que viene a significar algo grande, importante.
Magia o “magna ciencia” es una ciencia que relaciona todas las cosas. Es evidente que hoy, con nuestra mentalidad actual, resulta difícil entender de forma clara qué es la magia, ya que la filosofía postcartesiana ha separado la magia de la religión, de la ciencia, y es el nuestro un tipo más de análisis que de síntesis, por lo que resulta casi imposible hacer realidad aquel ideal platónico del hombre filosófico, del hombre mago que podía tener un conocimiento integral..."