Existen contenidos esenciales de nuestra fe que básicamente se encuentran en el Símbolo de nuestra fe, el Credo, en las Sagradas Escrituras, en el Catecismo de la Iglesia Católica, en el Magisterio de la Iglesia, en la enseñanza de los Padres de la Iglesia, y en la Tradición. Es ahí donde deberíamos acudir con más frecuencia, ahí encontraremos nuestro contenido de la fe.