Esteban Videla Pearson, responsable de Agricultura Digital en SKYFLD Argentina, nos cuenta cómo ha sido la adopción del agricultor argentino de esta tecnología y las expectativas para las próximas campañas. También conversamos sobre las oportunidades y ventajas que ofrece la digitalización del agro y el uso de insumos biológicos.

La sostenibilidad en Tokio 2020 ha sido tan protagonista como los atletas para lograr los primeros juegos olímpicos de la historia neutros en carbono.

Encontrá mucha más información en www.bioeconomia.info

La pandemia ha coincido un despliegue del urban farming, un concepto que lleva a la agricultura a la ciudad, ya sea aprovechando los espacios verdes de las áreas urbanas y periurbanas o bien, las terrazas o balcones de los edificios.

En junio pasado, nuestro biólogo amigo y especialista en ciencias de la vida, Cristian Desmarchelier, nos explicaba cuáles eran los drivers que estaba impulsando este fenómeno, además de darnos un gran pantallazo de los distintos sistemas y tecnologías que hay detrás de este método de producción de alimentos.

A raíz de esa nota, nos contactó Rodrigo Iribarren, un ingeniero que junto a sus socios ha creado Aquagarden, una empresa argentina que desarrolla y fabrica tecnologías para sistemas de agricultura indoor. Nos encanta que haya desarrollos nacionales y como no podía ser de otra manera, lo invitamos a que nos presente su línea de productos.

Hace pocas semanas, tomamos conocimiento de Plenta, una joven startup que produce verduras de hoja verde en sistemas hidropónicos en la localidad de Fátima. Fue una grata sorpresa enterarnos que la persona que está detrás de este emprendimiento es Romina Güeli, de larga trayectoria en multinacionales de insumos agropecuarios.

A punto de comenzar la primera cosecha en la historia de Plenta, le pedimos a Romi que nos cuente todo sobre su proyecto. Una linda charla de jardín, o mejor dicho de invernadero, donde tocamos temas productivos, tecnológicos, comerciales y hasta nos metimos en el mundo del emprendeurismo. ¡No te la pierdas!

Los temas de la semana resumidos en pocos minutos

La economía circular es una estrategia enfocada en lograr una mayor sostenibilidad productiva a partir del reemplazo de materias primas vírgenes por residuos o desechos de otros procesos. Cuando estos materiales son derivados de procesos que parten de materias primas sostenibles de origen biológico, estamos en el mejor de los mundos. En la bioeconomía circular.

Si viajamos por todo el país, nos vamos a encontrar que muchísimas agroindustrias generan estos residuos de alta carga orgánica, que suelen causar más de un dolor de cabeza a los responsables ambientales. Pero aplicando este enfoque, que requiere del conocimiento, la tecnología y la imaginación, es posible transformar estos efluentes en materias primas o insumos para otros productos, convirtiendo un gran problema en una gran oportunidad para agregar valor y reducir costos.

Así, por ejemplo, es posible convertir los efluentes de la producción de etanol en energía que puede utilizarse en el proceso y biofertilizante que permite devolver al campo los nutrientes que se lleva el cultivo. O bien, puede aplicarse el mismo criterio en una industria láctea, o al procesamiento de limones, o la producción de vinos, o en un relleno sanitario, o en cualquier industria que procese materias primas de origen biológico.

En un intento por demostrar el abanico de opciones y tecnologías disponibles para el aprovechamiento de estos residuos, y los impactos económicos, ambientales y sociales de este enfoque, Ecomagement, la empresa líder en soluciones de bioeconomía circular, ha lanzado un tour por todo el país.

Como no podía ser de otra manera, convocamos a Leonardo Genero y Juan Cabusch, responsable técnico y comercial respectivamente de Economangment, para que nos cuenten de que se trata esta iniciativa sin precedentes en el país. ¡Enterate acá!

Los temas de la semana resumidos en pocos minutos.

Es muy probable que en el futuro, muchos nos acordemos del 2021 como el año del despegue de la química verde.

En los últimos meses hemos publicado en el portal una gran cantidad de proyectos que buscan descarbonizar la industria química con productos de origen biológicos, ya sea a gran escala como el que presentamos hace pocas semanas en el que Cargill-Helm construirán una planta de Bio-BDO a partir de maíz, o productos de nicho para la industria médica o de cosmética.

En este último sector, el aceite de ricino está atravesando un momento espectacular. Las proyecciones indican que el mercado mundial de aceite de ricino se expandirá a una tasa compuesta anual del 3.0% entre 2018 y 2026, y se espera que alcance un valor de al menos U$S 1.100 millones para el final de este período.

Hace unas semanas, nos enteramos que se estaba cocinando un importante proyecto para producir y procesar el ricino en Argentina y sus países vecinos. Quisimos conocer un poco más de que se trataba y nos encontramos que detrás del mismo se encuentra el Chino Martinez Moreno, un emprendedor serial y especialista en marketing y fintech.

Abusando de su gentileza, le pedimos no solo que nos describa este proyecto, sino que nos de sus perspectiva sobre las barreras y los desafíos a sortear para ser un emprendedor en el país.

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Los temas de la semana contados en pocos minutos.

El cambio climático es el mayor desafío ambiental que enfrenta la humanidad. Es el resultado de un aumento en la concentración de ciertos gases en la atmósfera, denominados gases de efecto invernadero (GEI), que retienen el calor causando un aumento en la temperatura del planeta.

Hay prácticamente consenso en la comunidad científica que es un fenómeno antropogénico, es decir causado por el hombre. Aunque también es cierto que es el aumento de la concentración de estos gases es un fenómeno natural de la Tierra. Pero ya no tiene sentido discutir cuánto ha sido responsable el hombre. Sus consecuencias están siendo devastadoras y sabemos como contrarrestarlo: descarbonizando el planeta.

Esto es lo que se ha propuesto la empresa argentina Bioceres, que dicho sea de paso, está teniendo un año espectacular. Recientemente, la compañía con base en Rosario, anunció que levantará una planta para construir paneles de construcción en seco a partir de la paja de trigo, un residuo que queda en el campo luego de la cosecha del cereal.

El proyecto sumamente innovador, está totalmente alineado a uno de los pilares que propone la bioeconomía: sustituir materiales minerales como el cemento, de alta huella ambiental, con materiales de origen biológico, de mucha menor huella de carbono. Pero además, estos paneles son térmicamente muy eficientes, lo cual permite reducir también el consumo de energía de las viviendas, y por lo tanto sus emisiones asociadas.

Quisimos conocer más acerca de esta iniciativa, y otras que viene llevando a cabo o tiene en carpeta Bioceres, para lo que convocamos a su Director de Estrategia, Claudio Dunan, quien gentilmente aceptó nuestra invitación. Dunan nos cuenta toda una serie de externalidades positivas en implicancias que pueden tener este tipo de iniciativas en el país.

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La Ley 26.053 sancionada en 2006 y que entró en vigencia el 01 de enero de 2010, fue creada “con el objetivo de promover el uso de combustibles que comprometan en la menor medida posible el medio ambiente, en el marco de una política consistente con la aspiración plasmada en el Artículo 41 de la CONSTITUCION NACIONAL”.

Además que los biocombustibles son por lejos la mejor alternativa para reducir las emisiones de carbono en el transporte, especialmente en un plazo inmediato, fortalecen los precios de nuestros productos de exportación, son un sostén para las economías regionales y contribuyen a reducir la importación de combustibles fósiles.

A partir de la Ley 26.053 y sus normativas complementarias, se construyó en Argentina un complejo de más de 50 biorrefinerías en 10 provincias, que ocupan 60 mil puestos de trabajo y facturan hasta U$S 2.500 millones por año sólo en biodiesel y bioetanol. Una cifra que no considera el valor de sus co-productos: la glicerina, la burlanda, CO2 y KWh de energía renovable entregados a la red.

En abril de 2021 el marco regulatorio cumplió sus 15 años de vigencia y los legisladores se perfilan para aprobar un polémico nuevo régimen, que propone una reducción sustancial en el uso de biocombustibles, violando el principio de progresividad establecido en la Constitución Nacional y poniendo en riesgo empleos y el cumplimiento de los compromisos ambientales asumidos.

Para analizar la nueva reglamentación y todo lo que se pone en juego, convocamos a dialogar a Claudio Molina, quien se desempeña como director ejecutivo de la Asociación Argentina de Biocombustibles e Hidrógeno. Molina fue el redactor principales de la Ley 26.093 y es el máximo referente a nivel nacional en materia de biocombustibles. ¡No te lo pierdas!